Peseta Street Journal

¿Realmente son activistas?

Recientemente, numerosas obras expuestas en museos de todo el mundo han sido víctimas de vandalismo por parte de varias asociaciones de activistas medioambientales. Es el caso de La Gioconda, expuesta en el Museo del Louvre; y Los Girasoles, en el museo National Gallery de Londres. El pasado mes de octubre, dos activistas arrojaron salsa de tomate sobre el vidrio que protegía este cuadro. A pesar de este hecho, sólo ha sufrido daños leves. Por ello, muchas galerías y exposiciones se han visto obligadas a tomar medidas frente a estos ataques. Es el caso del Museo Nacional del Prado, que en los últimos días ha decidido contratar a más vigilantes de seguridad, prohibir la entrada al recinto con comida y líquidos y proteger las obras de arte con cristales y vitrinas; puesto que, actualmente, en algunas de ellas se habían suprimido las medidas de protección para dar una sensación de “cercanía” con los visitantes. Esto nos lleva a pensar si realmente estos actos vandálicos están sirviendo para concienciar a la población sobre el cambio climático; o si, solamente, pretenden llamar la atención de dirigentes políticos y líderes mundiales para conseguir lo que se propongan. Muchas personas, principalmente los trabajadores encargados de restaurar las obras de los museos afectados, opinan que estos actos son una incongruencia y que únicamente quieren hacer publicidad. Igualmente, los empleados que trabajan en los edificios destinados a la conservación de estas consideran que están más pendientes de ciertos cuadros porque poseen algunos muy representativos, y dejan sin vigilancia a otros. Un ejemplo muy claro de estas acciones infundadas se pudo observar cuando las activistas pertenecientes a la asociación Stop Fossil Fuel Subsidies atentaron adhiriéndose con pegamento a la célebre obra de las latas de sopa Campbell de Andy Warhol en la Galería Nacional de Australia, pidiendo de esta forma al Gobierno que dejase de colaborar con las industrias dedicadas al petróleo, el carbón y el gas natural. Estas consiguieron salir del museo antes de ser detenidas por la Policía, dado que según las autoridades emplearon un pegamento “de mala calidad”. Horas más tarde, el representante de la entidad colgó en Twitter y demás redes sociales el vídeo en el que aparecían dos personas con unas pelucas pintando en el vidrio protector del mismo. Pero, ¿realmente se le podría llamar activista a alguien que, para lograr un cambio en la sociedad, daña obras de arte de un valor incalculable y cuyos autores vivieron hace tantos años? Sinceramente, considero que solo pretenden llamar la atención mediante unos problemas que, a pesar de ser muy importantes, la manera que tienen de afrontarlos y defenderlos es claramente errónea. Además, el gasto económico que supone el arreglo de los desperfectos y el daño a la cultura me parece que no justifican estos actos; que no son para protestar sobre el cambio climático, sino que únicamente quieren hacer publicidad. Por estas razones, ¿se les podría llamar activistas?, ¿o deberían ser considerarlos delincuentes? Marina Chamorro López 3º ESO A

¿Gusto o aberración?

Es una realidad que hoy en día hay mucha disputa por los gustos musicales de los jóvenes. Es algo que realmente causa mucho furor ya que hay ciertas personas que no comprenden los gustos de las nuevas generaciones. Esto da lugar a muchas críticas, defendiendo así que las generaciones actuales no tienen cultura. Pero, ¿es legítimo anular los gustos ajenos por no coincidir con los de uno mismo? A día de hoy, la mayoría de los jóvenes escuchan estilos musicales como el ‘reggaeton’ y el ‘trap’. Este tipo de música ha experimentado un notable auge entre los jóvenes en las últimas décadas. Ya no solo para salir por la noche, sino para ir en bus, ir a comprar el pan o darse una ducha. Sin embargo, es algo que no todo el mundo comprende o comparte. Pero, ¿tienen verdaderamente una opinión razonada? Es cierto, que muchas de estas canciones tienen letras que degradan a distintos grupos dentro de la sociedad, en concreto a las mujeres. Por ello, este estilo musical recibe muchas críticas por parte de los adultos. Y aunque no se puede negar que es cierto, que los jóvenes escuchen ese tipo de música no significa que tengan este tipo de mentalidad y ni que compartan estos valores. De hecho, hay otros estilos musicales y canciones muy famosas que también son misóginas, como ‘Blurred lines’ (Robin Thicke) que trata a la mujer como un animal, o «Every breath you take’ (The police) la cual tiene como mensaje principal los celos y la posesión. Por no hablar de ‘Sí, sí’ (Los ronaldos) que habla de la violación, ni de ‘No te escaparás’ (Hombres G), canción en la cual se da por hecho que la mujer es un objeto sexual del hombre. Por otra parte, se utilizan los argumentos de que ese tipo de música no es música, es decir, que no es buena y, además que como estos artistas (mayoritariamente) no han estudiado música, no saben lo que están haciendo. Básicamente se le quita valor a su trabajo. Hay que entender que los gustos son subjetivos lo que explica que a alguien le puede gustar mucho una camiseta pero otra persona la puede odiar. Además, que un artista, ya sea pintor, poeta, escultor, etc, realice una obra con una serie de estudios detrás, no significa que sea más o menos buena, es decir, no define su calidad. Somos unos abanderados del respeto mutuo pero en cuanto algo no nos cuadra, lo criticamos. Se tiene que entender que el éxito de una pintura, escultura o canción no depende de su calidad sino de si conecta con la gente o no. Que algo triunfe o no triunfe no depende de su calidad, y eso hay que aceptarlo. Puede haber un músico buenísimo que se ha dedicado toda su vida a estudiar música, pero no triunfa porque no gusta, no porque no sea bueno. En definitiva, tenemos que reconocer que el triunfo de la música urbana se debe a que les gusta a los jóvenes, no porque sea mejor o peor que una canción de Julio Iglesias. Marina Gallego. 4º ESO

⇌ Johannes Gutenberg ⇋

~The world-changing inventor~ Have you ever heard about Johannes Gutenberg? No, right? Don’t hesitate, we got you! Not many people know about him, so keep reading to know more. First of all, he lived in Germany and was a goldsmith. He was not successful in his life, although, is well known for having designed and built the first printing press in Europe. He invented it in 1450, after years of secret research. This would transform the way knowledge was spread throughout Europe. He already had experience working at a coin mint and realized that if he could use books to cut inside of a machine, he could make the printing process much faster. Even better, he could duplicate texts in large amounts. As well, the printing process enabled mass production of books that could transmit ideas across previously impossible distances. This is why he revolutionized the world. He was not only famous for inventing the printing press, but one of his most recognized work was the 42-line Bible which is considered to be the first printed book with a removable type. There are twenty one complete Gutenberg Bibles existing nowadays. You might wonder how much this antique group of paper costs, well the answer is 65 million euros. Impressive right? Each of its pages cost 1300, so if you want to purchase it, start earning money. Although his life in general was great, in 1462 he was exiled from Mainz. However, things turned out for him and in 1465 he was given a fancy title, a yearly salary and rewards for his invention. Therefore, his childhood wasn’t the best and was hard, despite the fact that he lived in a big mansion in which money  never ran out. His home was surrounded by a forest where his family usually went hunting. His dad was a gold-smith and worked as the director in the money factory. Johannes was a really curious child who loved sneaking around his father’s office to read scientific articles and engineering books and often stole some from the bookshelf. In addition to this, at school he was one of the best students with straight A’s on each subject. He didn’t have many friends and was very quiet and shy, nevertheless his mind was always producing astonishing ideas. This led him to his death in 1468. He was buried in a Franciscian church in Mainz, but many years later, both the church and his grave disappeared due to artillery fire that surrounded the city in 1793. To sum up, he was a highly influential person that achieved fame for his contributions to printing technologies and never gave up. «The printing press is an empire of 26 tin soldiers with which one can conquer the world.» Eva Fresno y Alejandra Calderón. 2º ESO

The Car

Un Toyota Corolla de los 80 protagoniza la escena, y puede que sea la mejor escrita hasta el momento. En un viaje que recuerda al esplendor de Las Vegas con tonos tanto psicodélicos como clásicos, los Arctic Monkeys toman las riendas para mostrarnos el resultado de su séptimo álbum de estudio: infinitas referencias, tonos que huyen de sus orígenes y baladas de angustia… Pero echemos el freno, que es preferible saborear el mundial a ganarlo tan rápido como Verstappen. The Car se anunció el 24 de agosto, para sorpresa de unos e incluso decepción de otros. Tras títulos tan icónicos como Favorite worst nightmare, o la extravagancia de Tranquility Base, los fans se encontraron ante una incógnita que les resultaba imposible resolver. ¿Un coche? ¿Y ya?. Resulta lógico, visto ahora, que nos habíamos olvidado de la magia que eran capaces de hacer estos cuatro con un teclado… y una bola de discoteca. La voz cálida de Alex con el sorprendente sonido del bajo (que suele mimetizarse entre los riffs de la guitarra) crean un ambiente retro, vintage, pero a su vez paradójicamente moderno. Body Paint recuerda a ese hotel en el espacio que se nos presentó en el disco anterior, y parece decirnos: ¿todo aquello que conocéis? olvidadlo. Esta música, además, huye del rock creado durante su época de mayor esplendor en AM. Los Arctic Monkeys demuestran que la reinvención, a menudo, no desemboca en fracaso, sino que conduce al auge creativo absoluto. Es curioso el viaje rural que evoca Hello you, y cómo a través de todo el disco Alex imita a Jay Gatsby cantándole a su Daisy. Detrás de todo el lujo, los coches y las bolas de discoteca, se alberga un aire algo tétrico y nostálgico. Su ápice lo consiguen con Sculptures of Anything Goes, remontándose hasta el odio pasional de Heathcliff en Cumbres Borrascosas. Tras la introducción del funk, la bossa nova y el glam rock, pisan el acelerador para acabar la carrera al máximo, y nos regalan Perfect Sense. Todo el disco forma un círculo perfecto en el que la línea entre el principio y el final resulta un margen borroso. Existe tal coherencia musical en The Car, que nos transporta incluso hasta Whatever People Say I Am That’s What I’m Not, y a sus orígenes. Puede que ya no canten sobre “verse bien en la pista de baile” ni sobre habitaciones de hotel misteriosas con el número 505 en la puerta, pero mantienen esa esencia creativa que les hace tan ellos. Caridad Martín. 2º Bachillerato

Abismo

Yo siento que bajo y caigo, siento que no puedo subir. Yo siento que bajo y caigo siento que nadie me puede oír. Quizás es una pesadilla, otra a la que olvidar. Y entonces miro al vacío bajo mis pies y me siento bajar y bajar. Cuando toque el suelo despertaré tengo firmeza de ello. Cada vez eso se acerca más y es que “eso” es el suelo. Siento que bajo y caigo que desciendo por este abismo. Al menos veo el cielo, azul, brillante, al menos veo mi destino. Algunos dicen que la vida es cruel ¡Menuda hipocresía! Si al final a ellos son los primeros a los que les va bien la vida. ¿Y mientras tanto yo que hago? ¡Nada más que bajar y bajar! Cierro los ojos, miro al suelo. Queda nada para llegar al final. Alba Arenas. 1º ESO

EL LIBRO QUE RESUELVE CONVERSACIONES DE BAR

¿Quién no ha oído hablar de los Récords Guinness? Esa maravillosa competición donde personas de todo el mundo se pelean por ver quién hace las cosas más increíbles. Ese lugar donde las personas compiten por una medalla que confirma que han logrado algo alucinante. Si, esos Récords Guinness. Todos hemos oído hablar de ellos. Ya sea por los libros, por la televisión o por la vecina de al lado. Son una competición donde la gente lucha para ver quién consigue hacer cosas para las que alguien debería estar loco. Por ejemplo, las uñas más largas del mundo, la persona más fuerte o la que más camisetas se pone en un minuto. Y antes de que digáis nada, este último sí que está en el libro. Esos eran algunos, pero hay muchos ,sorprendentemente estúpidos, que la gente sueña con alcanzar. El libro Guinness lleva más de 60 años con nosotros y su historia es mucho más normal que los objetivos a cumplir de él. La idea de un libro de récords surgió en la década de 1950 cuando Sir Hugh Beaver, director general de la destilería Guinness estaba de caza en Wexford, Inglaterra. Allí, él y sus amigos se preguntaron cuál sería el ave de caza más rápida, pero no encontraron respuesta. En 1954, recordando esta discusión, Hugh tuvo una idea para promocionar la cerveza Guinness basándose en la idea de un libro que resolviera estas preguntas que también tenían lugar en los bares y pubs del lugar. Invitó a los gemelos Norris y Ross McWhirter a compilar un libro de datos y hechos. Guinness Superlatives fue fundada el 30 de noviembre y abrió en dos salas de un gimnasio londinense reconvertido  en oficinas. Después de la fase de investigación, los gemelos McWhirter trabajaron en el libro por más de 13 semanas (lo que son aproximadamente tres meses), con semanas de trabajo de 90 horas. Poco sabían que estaban preparando uno de los libros más vendidos del mundo, el cual, al principio, se llamaría “The Guinness Book of Records”. Han pasado 65 años de la inauguración de este libro, y serán 66 años en noviembre de 2020. Ahora mismo, Guinness World Records ha parecido eclipsar a la cerveza de la misma marca. Como hemos dicho antes, este libro cuenta con records de todo tipo. Los hay imbatibles por humanos, como el de la galaxia más lejana o el agujero negro más grande. Otros, en cambio, son fáciles para los adictos a los videojuegos, como el viaje más largo realizado en Minecraft, otros son divertidos para los amantes de los animales, como Zac, el loro que logró abrir 35 latas de bebida en un minuto. Todos son entretenidos, pero otros… Es que necesitan un artículo para cada uno. Aquí tenéis algunos de ellos: Un hombre de Maharashtra, India, bate el récord de tener la mayor longitud en uñas. Son, concretamente, las de la mano izquierda, que miden 909´6 cm en total. La del dedo pulgar es la más larga, midiendo 197´8 cm. Si la extiende, es más larga que un jugador de la NBA. Un hombre llamado Anthony Williams, buceó bajo el agua helada de Nueva Zelanda, durante 70 metros  aguantando la respiración dos minutos y veintinueve segundos. No utilizó bombonas de oxígeno ni nada para respirar, solamente uso un par de aletas, y un traje de buceo. Charlotte Guttenberg, la anciana con más tatuajes del mundo, llega a cubrir un 98,75% de su cuerpo con ellos, teniendo en total 216. Actualmente tiene 69 años, pero el primer tatuaje que se hizo fue con 50 años. Un «huevo» supera a Kylie Jenner batiendo el récord mundial de más “me gusta” en Instagram. Nuestra opinión sobre los récords es extraña. Pensamos que son locos, ya que las cosas que hay que hacer para lograr uno varían mucho; los hay sencillos, tales como los de videojuegos o los de mascotas; los hay complicados, como los de las uñas más largas o el monopatín más grande del mundo; los hay locos, igual que el de la persona en llamas arrastrada durante más tiempo; y los hay imposibles, como el de la galaxia más grande o el de la estrella más lejana. Hemos querido que la gente comprendiera este mundo de diversión, superación y locura. Los récords Guinness nos parecen tan extraños como curiosos. Aunque siempre sean los mismos, tenemos claro que jamás dejarán de sorprendernos.   Alba Arenas y Andrea Macías 1ºESO

Castellano versátil

“Hay unes poques diputades que están indecises”. Aunque parezca un versículo en francés, te puedo asegurar que es la lengua castellana del siglo XXI. Esta frase célebre fue enunciada por una estudiante argentina a favor del aborto, en un vídeo viralizado este verano pasado. Y aunque parezca una película de ficción cuya sinopsis es la destrucción de la lengua desde la raíz, es un tema que se ha puesto sobre la mesa política y provoca movilizaciones multitudinarias en las calles, la maldad de un inocente fonema en una palabra que parece ofender más que su propio significado. El lenguaje inclusivo nace cuando el uso del “género cero”, respaldado por la Real Academia Española (RAE), en la Constitución Española de 1978 (“Todos los españoles”) ofende a un colectivo feminista que culpa de un crimen tan despreciable como no especificar “Todos y todas los españoles y españolas” a un histórico-legendario sistema patriarcal que se llevó Francisco Franco a su tumba. Carmen Calvo, vicepresidenta del Gobierno y ministra de Igualdad, propone “adecuar la Constitución Española al lenguaje inclusivo, con o sin la RAE” (ABC). Este acto de rebeldía da a conocer cómo de felices estarán las mujeres sabiendo que no tendrán protección laboral si son madres y acabarán en el paro, pero al menos hacen caso a sus plegarias y eliminarán la opresión machista de un deleznable fonema, culpable de tener un “padre misógino” llamado latín. Para los que no hayan encendido aún el oxidado detector de ironías, citemos al estrado al “Manual de Lenguaje inclusivo con perspectiva de género”, acusado de priorizar el uso no sexista de la lengua en el Gobierno de Aragón en febrero de 2019 como máximo problema. Por alguna razón inexplicable, llamar a un par de niños (niño y niña) “niños” es machista y se debe recurrir al cariñoso apodo que recibe Gollum del Señor de los Anillos, “criatura” (El Mundo). Si demonizar “niños” no era suficiente adrenalina para ti, lector (lectora, lectriz, lectxr, lecter, Hannibal), a la mujer y al hombre se les referirá como “el género humano”, para perder la poca humanidad que queda en estos procesos burócratas. La misma lucha feminista que batalló por la aprobación del voto de la mujer (Clara Campoamor) y de la igualdad educativa entre sexos (Emilia Pardo Bazán), ahora es la misma que es orquestada en el siglo XXI por una generación de ofendidas con el fonema “o”, que dice no representar a las mujeres. Estamos en una guerra entre sexos en la que un hombre debe aceptar el lenguaje inclusivo por miedo a ser llamado machista, mientras que la mujer se debilita autoproclamándose “víctima del patriarcado”, cubriendo un fascismo contemporáneo donde antes se censuraba una ideología política y ahora el comportamiento normal y libre que había entre hombres y mujeres con la bandera del feminismo.   Fernando Fernández Álvarez (2ºBachillerato)

Aprender a leer

He vivido mil y una vidas, ¿y tú? He sido otras personas, y no soy esquizofrénica, ¿y tú? He estado presente en la Segunda Guerra Mundial, y también en las guerras bárbaras. He soñado con flores salvajes, el océano me ha mirado a los ojos, y he sentido el latir de las estrellas. ¿Qué hay de ti? ¿Has resuelto el misterio de un asesinato? ¿O quizá has sido capaz de hacer magia? Porque yo sí, y no he renacido en el inframundo para vivir todo ello. ¿Alguna vez  os habéis deleitado con el olor a papel impreso? ¿Alguna vez las lágrimas han resbalado por tus mejillas sin sentido alguno? ¿Cuántas veces os ha llegado un paquete que contiene mundos totalmente diferentes y únicos? Vuestra respuesta podría ser: 0. La mía: 1001. Os diré la clave para poder entender lo que os acabo de decir: leer. Aprender a leer abre tu mundo a tres dimensiones. ¿Y por qué digo “aprender” a leer, si apenas hay gente analfabeta? Porque no todo el mundo es capaz de encontrar esa magia. La magia que te hace embelesarte en cada palabra. La magia que te hace reír, llorar, y sobre todo, vivir. Al vivir un libro, muchas veces el mensaje te da una bofetada en toda la cara. Descubres la realidad. Te quitas esa venda de los ojos creada con mentiras. Nada es tan intenso como cuando un libro  te devuelve las ganas de vivir tu vida. Leer es una vía de escape, y a la vez un pozo sin fondo. Te olvidas de tus propios problemas, pero te inquietan los de los demás. Incluso a veces, esos mismos problemas crean lagunas profundas en las que te ahogas, te asfixian porque te quieren mostrar lo que tú mismo te ocultas, hasta que comprendes y aceptas, y decides cambiar, ahí es cuando entras en un estado de apnea y dejas que esas lagunas te absorban como su propia medicina, que produce su sequía. Eso es lo que más apreció de un libro, la capacidad que tiene de hacerme ver el mundo como es. Ahora escuchadme bien, si no habéis sentido nada parecido a lo anteriormente dicho, seguid los siguientes pasos: Id a la biblioteca Escoged un libro cuya portada os atraiga Leed la contraportada Si nos os llama la atención, repetid estos pasos hasta encontrar el libro que os haga un tatuaje a fuego en el corazón.   Queridos lectores, recordad, aprended a leer y  vivid un libro.   Paula Tudic

Diario de una mujer en pantalones

19 de agosto, 1883 Puedo sentir la luz del sol entrar a través de mis débiles párpados y el aroma del dulce río Loira a través de la brisa que entra por la ventana. Las sonrisas de mis orgullosos padres relucen en mares de alegría y mis llantos se podrían oír a kilómetros de distancia. Con el rabillo del ojo puedo ver a mi hermana tirando del vestido de mi madre en busca de atención, pero ella está demasiado ocupada examinándome. Tiene el pelo recogido en un moño y está agotada por el parto, pero sigue siendo bellísima. Sus penetrantes ojos verdes esmeralda podrían iluminar toda la habitación sin esfuerzo y sus dedos largos y sedosos entrelazados en mi cuerpo son como una canción melodiosa, cual único fin es tranquilizarme. Esta mujer es la luz de mi vida, espero no perderla nunca.   21 de abril, 1887 (cuatro años después) Las láminas de madera del suelo de mi casa crujen a cada paso que doy, parece que vayan a partirse en cualquier momento. Es un lugar frío y apenas entra luz por las polvorientas ventanas, aunque me encanta esta casa. Es muy acogedora y puedo llamarla mi hogar. Me gusta ir correteando por ella e ir de puerta en puerta por las mañanas despertando a todo el mundo. No veo a mis padres habitualmente debido a que están trabajando en el campo o vendiendo productos por todo el país. La mayor parte del tiempo lo paso con las monjas del hospital de Saumur (donde nací) o jugando con mi hermana mayor de cinco años. A pesar de todo esto, mi parte favorita del día llega por la noche, cuando nos vamos a dormir. A esa hora mi madre suele llegar de trabajar, y por muy cansada que esté, siempre se sienta a los pies de nuestras camas y nos cuenta historias. Cada día que pasa se va debilitando más y más, y es que por mucho que lo intente fingir cuando está delante nuestro, yo puedo ver tras sus ojos débiles y apagados.   Un día de 1895 que prefiero no recordar (ocho años después) Lágrimas caen de mis mejillas a un ritmo constante. Me estoy ahogando en un mar de tristeza y desesperación del que no puedo salir, no encuentro el rumbo. Mi madre lleva tres años enferma. Siempre he sabido que este día llegaría, pero jamás imaginé que pudiese suceder tan pronto. Yace en una cama de rosas rojas y blancas tan bellas como ella. Sus finas manos están colocadas sobre su pecho en forma de cruz y aún no se le ha borrado la sonrisa de la cara. Como voy a echar de menos esa sonrisa. Levanto la cabeza un momento para mirar a mi padre. Me está mirando con pena y decepción. Miles de pensamientos me llegan a la cabeza al ver esa mirada… ¿Qué será de mi hermana y de mí ahora que mi madre ha muerto? Mi padre no se puede permitir tenernos a las dos en casa, somos demasiado pobres. Alzo la mirada una vez más para encontrarme con los ojos de mi padre y asiento con confianza, sé lo que tengo que hacer. Sus ojos se llenan de lágrimas las cuales intenta esconder, pero ya es demasiado tarde. Rompe a llorar y abrazándome me susurra al oído: -Sé que llegarás a muchas cosas en la vida, simplemente no te rindas, y haz que tu madre esté orgullosa de ti. Con estas palabras, me cogió de la mano a mi hermana y a mí y partimos de camino al orfanato de Saumur.   2 de junio, 1901 Mi hermana me ha acompañado hoy a conseguir empleo en una pañería después de haber estado bastante tiempo como ayudantes de sastre. Los hombres que trabajaban ahí nos han invitado esta noche al cabaret de la ciudad y estoy bastante nerviosa ya que nunca he atendido a uno. Siempre me ha parecido muy interesante el mundo del espectáculo. Los cantantes, actores, pianistas… estoy deseando ir. Me han dicho los hombres de la pañería que vista mis mejores galas, y después de mucho tiempo ahorrando, por fin tengo el suficiente dinero para comprar un vestido. Las bailarinas han sido algo de otro mundo. La música resonaba en mis oídos como la más dulce melodía. El pianista tocaba con tanta facilidad las teclas que parecía que sus dedos estuviesen bailando. Y yo…  bueno, digamos que ha pasado lo que menos me esperaba. Los hombres que habían venido con nosotras han tomado nuestras manos y nos han levantado de nuestros asientos para que bailásemos con ellos. Todo ha empezado como un simple juego, y se ha convertido en algo más. Los dueños del local han entrado en ese mismo instante y nos han estado observado. Al acabar la canción se han aproximado al lugar donde estábamos y me han mirado con cara perpleja. Nunca me podría haber imaginado que de una simple noche de diversión en el cabaret, me hubiesen ofrecido trabajar ahí como bailarina.   4 de marzo, 1906 Después de pasar tantos años desarrollando mis habilidades como bailarina en el cabaret, he decidido venirme a vivir a Vichy. Siempre he querido actuar como una gran bailarina, y espero que mis aptitudes para ello sean lo suficientemente buenas como para impresionar a los productores.   11 de marzo, 1906 Más de una semana llevo intentando tener éxito en las audiciones, y es que por muy asombrados que parezcan los productores con mis capacidades físicas, necesitan una voz, y yo no puedo darles eso.  Mi única esperanza es encontrar trabajo en esta inmensa ciudad.   23 de octubre, 1910 Hoy es el gran día. He decidido abrir una tienda de sombreros en París. Siempre me ha parecido espectacular la moda francesa y los sombreros confeccionados con detalles y sortijas. Desde mi punto de vista, las joyas y los sombreros son los complementos imprescindibles en una mujer. Quiero enseñarle al mundo lo que puedo hacer y el primer paso

Solo tengo una carta

Solo tengo una carta, nada más.   Fecha negra, anuncio de realidad. No tengo nada más.   Te imagino en el frente defendiendo voces impostadas de un ideal ajeno.   Desvelas la memoria de mis recuerdos   Ladra la conciencia de la noche. Niego este absurdo amanecer, si no tengo la certeza de tu ocaso.   ¿Por qué no descansan tus manos entre aquellos humildes olivares?   Solo tengo una carta nada más.